También hubo asesinos en serie en la antigüedad
Muchas personas creen que la aparición de los asesinos en serie es un fenómeno reciente. Sin embargo, no es así. Este tipo de personajes han existido desde la antigüedad. Hoy hablamos de ellos.
La revista “TIME”, en el año 1983, acuñó el término “asesino en serie”, para definir a un nuevo tipo de asesino. Esto dio pie a que muchos historiadores e investigadores de este tipo de fenómenos dijeran que la revista “TIME”, estaba equivocada, pues ya en el siglo XIX, se tenía constancia de un primer asesino en serie conocido: Jack el destripador. También estos eruditos se equivocaban, pues este tipo de homicidas se conocen desde hace casi, al menos dos mil años.
El primer caso del que se tiene constancia no es el de Jack el destripador, sino el de una mujer llamada “Locusta”, que envenenaba sistemáticamente a sus víctimas solo por placer. “Locusta”, fue ejecutada por orden del emperador romano Galba en el año 69 D.C., por los asesinatos del emperador Claudio y de su hijo Britannicus.
Cuatrocientos años más tarde, en pleno siglo V, en Yemen, un adinerado y poderoso individuo llamado Zu Shenatir, se dedicó a atraer a niños y a menores a su casa, diciéndoles que les daría comida y algunas monedas. Una vez allí, los violaba y después los arrojaba desde una ventana. En realidad, se desconoce el número de víctimas de Zu Shenatir, pero lo que sí se sabe gracias a los registros de la época, es que este individuo fue asesinado con un cuchillo por uno de los niños que intentaba violar en su casa.
En Europa, otro hombre noble y rico, el barón de Gilles de Rais fue quemado vivo en el año 1440 por asesinar a cientos de niños en rituales satánicos.
En el año 1542, una cocinera inglesa llamada Margaret Davey fue escaldada viva por envenenar a muchos de sus empleadores sin ningún motivo ni razón aparente.
En 1661, la condesa húngara Erzebhet Bathory fue encerrada viva por torturar a cientos de mujeres por simple diversión.
Marie de Brinvilliers fue ejecutada en 1676 por envenenar a todas sus amistades, vecinos e incluso a su propio padre.
En 1719 las autoridades italianas ejecutaron a una mujer, conocida como la “Tofania” por envenenar a 600 personas.
En la Inglaterra de 1828, los “resureccionistas” Burke y Hare asesinaron a 11 personas para proporcionar cadáveres a los médicos anatomistas de la época.
En 1851, la cocinera bretona Helene Jegado fue ejecutada por haber matado a 60 personas a lo largo de veinte años.
Así que Jack el destripador, a pesar de las creencias de historiadores e investigadores, no deja de ser uno más., además de no ser el primero en ese tipo de asesinatos. De hecho, se sabe que apenas 20 años antes que él, un francés llamado Joseph Phillipe asesinó de manera sistemática a prostitutas francesas en 1860. Sin embargo, la fama de Jack el destripador gracias a la publicidad de los periódicos de la época interesados en vender muchos ejemplares, motivó la aparición de imitadores en Moscú, Viena, Nicaragua y Texas hasta el año 1900.